Holaaa!! Como andan??
Antes que nada, ya leyeron los otros caps? Porque estuve actualizando bastante
rápido y no quiero que ninguno se pierda nada, así que porfa revisen… bueno,
espero que disfruten esta primer parte de 2 (supongo que no van a ser más)…
Capítulo 18
Alma
Superviviente
Mansión Fowl; noventa y
ocho minutos después
Artemis estaba haciendo las preparaciones finales
en su oficina, actualizando su testamento y tratando de dominar sus
sentimientos, apisonando un liso cielo gris de tristeza que amenazaba con
nublar su resolución. Sabía que el Dr. Argon le advertiría en contra de
reprimir sus emociones ya que lo llevaría a un miedo psicológico a largo plazo.
“Pero no habrá largo plazo, Doctor,” Pensó irónicamente.
Después de tantas aventuras, Artemis sintió
como si debería haber sabido que las cosas nunca resultaban ser exactamente
como las había planeado, pero aún se sintió sorprendido ante la finalidad de
ese paso que estaba forzado a tomar—y también ante su deseo de incluso
considerar tomarlo.
El niño que secuestró a
Holly Canija todos esos años atrás nunca hubiera contemplado la noción de
sacrificarse a sí mismo.
Pero él ya no era ese niño. Sus padres lo
habían restaurado, y tenía hermanos.
Y amigos cercanos.
Algo más que nunca había anticipado.
Artemis miró sus manos temblar y firmó su
última voluntad y testamento. Qué tan válidos eran muchos de sus legados en
esta nueva era, no estaba seguro. El sistema bancario estaba casi
definitivamente irremediablemente dañado, como lo estaba la Bolsa de valores
mundial. Así que allí iban las acciones, bonos, y participaciones.
“Todo el tiempo gastado acumulando riquezas,”
Pensó Artemis. “Que pérdida.”
Entonces:
Vamos, ahora. Simplemente
estás siendo un llorón. Amas el oro tanto como Mantillo Mandíbulas ama el pollo.
Y, dada la oportunidad, probablemente harías lo mismo de nuevo.
Era verdad. Artemis no creía en las
conversiones en el lecho de muerte. Eran demasiado oportunistas. Un hombre debe
ser lo que es y aceptar que cualquier opinión viene próxima al mentón.
“Si hay un San Peter, no discutiré con él en
las Puertas del Cielo,” Prometió a su subconsciente, a pesar de que Artemis sabía
que, si su teoría era correcta, se atascaría en este plano como un espíritu,
justo como los Berserkers estaban.
Puedo ser un guardaespaldas
sobrenatural para Myles y Beckett.
Esta noción confortó a Artemis y lo hizo sonreír.
Se dio cuenta que no estaba para nada asustado, como si lo que estuviera por
intentar fuera una simulación del juego de rol* más que un curso actual de acción.
Esto cambió cuando Artemis selló su testamento
en un sobre y lo apoyó sobre la lámpara de escritorio. Miró al documento,
sintiendo la finalidad en el momento.
Ahora, no hay vuelta
atrás.
Y luego el miedo cayó sobre él como una
tonelada de peso, sujetándolo a la silla de oficina. Sintió un bloque de plomo
solidificarse en su estómago, y de pronto sus extremidades parecían injertas
dentro y fuera de su control.
Artemis tomó muchos hondos suspiros antes de
evitar vomitar, y gradualmente su calma retornó.
Siempre imaginé que habría
un tiempo para despedidas. Un momento para palabras con significado para aquellos
que amo.
No había tiempo. No lo había para nada excepto
para la acción. El miedo había pasado y Artemis aún estaba enmarcado en su
curso.
“Puedo hacerlo,” Advirtió. “Puedo pensar con
mi corazón.”
Empujo su silla roja oscura de vuelta en sus
rueditas, palmeó sus rodillas una vez, y se mantuvo frente a su sufrimiento.
Holly estalló dentro de la oficina con asesinato
escrito en sus ojos.
-Vi lo que vino de la bodega de vinos,
Artemis.
-Ah, -Dijo el chico. -El huevo llegó.
-Sí, sí llegó. Y mire lo que había dentro.
Artemis suspiró. -Holly, siento que lo hayas
visto. Se suponía que Mantillo lo escondería.
-Mantillo es también mi amigo, y le dije que
tratarías de halar algo. Estaba cavando un túnel de escape de último minuto
cuando el huevo llegó en piloto automático. Mantillo se figura que esta es la
cosa que estás tratando de tirar.
-Holly, no es lo que piensas.
-Sé lo que estas planeando. Lo he
descubierto.
-Suena radical, lo sé, -Dijo Artemis. –Pero
es la única manera. Tengo que hacerlo.
-¡¿Tú tienes
que hacerlo?! -Dijo Holly, enfurecida. -Artemis Fowl hace las elecciones de
todos, como siempre.
-Quizás, pero esta vez estoy justificado por
las circunstancias.
Holly de hecho tiró de su pistola. -No. Olvídalo,
Artemis. No va a pasar.
-Tiene que ocurrir. Tal vez con tiempo y
recursos podría desarrollar una estrategia alterna…
-¿Desarrollar una estrategia alterna? No
estamos hablando de la adquisición de una corporativa, Artemis. Es tú vida. Intentas
salir allí y matarte ¿Qué pasa con Mayordomo?
Artemis suspiró. Le dolía dejar a Mayordomo
inconsciente, ignorante del plan, especialmente porque sabía que su confiable
guardaespaldas se consideraría una falla.
Daño colateral. Justo como
yo debería ser.
-No. No puedo decirle, y tampoco lo harás tú…
Holly lo interrumpió con una sacudida de su
pistola. -No recibo órdenes de ti, Sr. Civil. Soy el oficial a cargo. Y estoy
categóricamente vetando esta táctica.
Artemis se sentó en su silla, descansando su
rostro en sus manos.
-Holly, tenemos treinta minutos antes del
amanecer, entonces moriré de todas formas. Mayordomo muere, y Juliet. Mi familia.
Casi todos los que amo se habrán ido. Todo lo que estás haciendo es asegurarte
de que Opal gane. No estarías salvando a nadie.
Holly se paró a su lado, y su toque era
ligero sobre su hombro. Artemis advirtió de repente que los elfos tienen un
olor distintivo.
Pasto y cítrico. Antes, habría
archivado esa información.
-Sé que no te gusta, Holly, mi amiga, pero es
un buen plan.
Los dedos de Holly viajaron al cuello de Artemis,
y él sintió un leve hormigueo.
-No me gusta, Arty, -Dijo ella. -Pero es un
buen plan.
Al parche tranquilizante le tomó unos
segundos trabajar, y luego Artemis se encontró arrodillado en la alfombra de
Afghan, su nariz separando las fibras de un diseño del árbol de la vida. La
droga entorpecía su mente, y no podía comprender exactamente lo que pasaba.
-Lo siento, Artemis, -Dijo Holly, arrodillándose
a su lado. -Opal es una de mi gente así que es mi sacrificio el que se debe
hacer.
El ojo izquierdo de Artemis rodó en su
agujero y su mano ondeó débilmente.
-No me odies por siempre, Arty, -Susurró Holly.
-No podría soportarlo.
Tomó su mano y la apretó con fuerza. -Soy un
soldado, Artemis, y este es un trabajo para un soldado.
-Tienes un buen punto, Holly, -Dijo Artemis,
claramente. -Pero es mi plan y, con todo respeto, soy el único que puede ser
confiado para ejecutarlo.
Holly estaba confundida. Solo un momento atrás,
Artemis había estado en la verja de la inconsciencia, y ahora estaba sermoneándole
en su usual tono altanero.
¿Cómo?
Holly retiró su mano y vio una pequeña ampolla
adhesiva en su palma.
“¡Me drogó!” Se dio cuenta. “Ese engañoso
Fangosillo me drogó.”
Artemis se incorporó y guió a Holly al sillón
de cuero, recostándola en los mullidos almohadones.
-Pensé que Potrillo podría delatarme, así que
tome un golpe de adrenalina para contrarrestar tu sedante.
Holly luchó contra la neblina que nublaba su
mente.
-¿Cómo pudiste…? ¿Cómo?
-Lógicamente no tienes derecho a estar
enojada. Simplemente seguí tu ejemplo.
Lágrimas llenaron los ojos de Holly, derramándose
por sus mejillas mientras la verdad la llamaba desde lejos, a través de un
neblinoso abismo.
Él realmente va a
continuar con esto.
-No, -Se las arregló para decir.
-No hay otro camino.
Holly sintió el vacío de un temor amargo en
su estómago.
-Por favor, Arty, -Murmuró. -Déjame… -Pero no
dijo nada más, ya que sus labios se habían vuelto de una goma floja.
Artemis casi se quiebra —ella podía verlo en
sus ojos dispares, uno humano, uno mágico— pero entonces se alejó del sillón y
respiró profundamente.
-No. Debo ser yo, Holly. Si el segundo candado
es abierto, entonces moriré, pero si mi plan tiene éxito, entonces todas las
almas de hadas dentro de la corona mágica serán llevadas a la otra vida. Almas de
hadas. Mi alma es humana, Holly, ¿no
lo ves? No pretendo morir, y hay una oportunidad de que sobreviva. Una pequeña,
concedido. Pero una oportunidad, de todas formas. -Artemis frotó su ojo con un
nudillo. -Como plan está lejos de ser perfecto, pero no hay alternativa.
Artemis acomodó a Holly con almohadones. -Quiero
que sepas, mi querida amiga, que sin ti, no sería la persona que soy hoy en día.
-Se inclinó más cerca y susurró. -Estaba roto, y tú me arreglaste. Gracias.
Holly era consciente de que estaba llorando
porque su visión estaba borroneada, pero no podía sentir las lágrimas en su
cara.
-Opal nos espera a ti y a mí, -Escuchó decir
a Artemis. -Y es exactamente eso lo que va a obtener.
¡Es una trampa! Quería
gritar Holly.
Estás caminando hacia una trampa.
Pero incluso si Artemis pudiera escuchar sus
pensamientos, Holly sabía que no podría desviarlo de su camino. Justo cuando se
figuró que Artemis había dejado la habitación, apareció en su campo de visión, con
una mirada pensativa en su rostro.
-Sé que aún puedes oírme, Holly, -Dijo. -Así
que te pediré un último favor. Si Opal me aventaja y no logro hacerlo fuera del
cráter, quiero que le digas a Potrillo que encienda la crisálida. -Se inclinó y
besó su frente. -Y que le des eso de mi parte.
Luego, el genio adolescente se fue, y Holly ni
siquiera pudo girar su cabeza para verlo marchar.
*Juego de Rol, también conocido como Juego de Papeles: https://es.wikipedia.org/wiki/Juego_de_rol
CHAN CHAN CHAN… si, lo
sé, soy mala por dejarlo hasta ahí, pero tiene en total 11 hojas el cap y
traducir y re leer todo junto de me hace muy pesado, así que aquí está J
Nos vemos en la 2º parte
jooo.... dejas con las ganas.....
ResponderEliminarbueno espero que el final llegue pronto!!
Le cortas la inspiracion a uno. Esperare con más ganas el siguiente capitulo. Y ubiera esperado un muy buen beso de despedida, como mi-ni-mo.
ResponderEliminarSaludos y gracias.
P.S. Los juegos de rol son la neta del planeta.
Si, yo tambien espere ese beso, y me tuve que contener para no agregarselo
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